Existen varios barrios en los que se conservan aun bellas casas solariegas, alguna de las cuales ha sufrido reformas poco afortunadas. Como en el barrio de la Torre, cuya casa ha sufrido muchas restauraciones, antes de la actual restauración presentaba síntomas de haber sido reconstruido en el siglo XIX, a juzgar por los elementos característicos del buhardillon y la solana entre voladizos, cerrada a modo de galería acristalada. En esta casa de enorme significación histórica, pues es la casa solariega del apellido “De la Torre” originario de Serdio, apellido que unas veces veremos como “Díaz de la Torre” y otros como “González de la Torre”.
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Ya en la primera mitad del siglo XV aparecen miembros de este linaje, así en 1418 vemos a Gonzalo González de la Torre, escribano, como testigo de una escritura otorgada a San Vicente y en esta misma villa encontramos en 1428 a Ruy González de la Torre. Sin embargo, del primero que tenemos noticia que vivia en el siglo XVI en esta casa de Serdio es Toribio de la Torre, quien casado con Maria González de Hoyos (esta ultima hija de Don Juan de Hoyos, señor de la casa y torre de Hoyos, en Narganes).
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En Serdio nacieron sus hijos don Francisco, don Nicolás y don Tristan de la Torre. Don Francisco fundo la Obra Pía de escuela de Serdio, cerca de su casa, y en 1616 su sobrino, el licenciado Fernando de la Torre, canónigo de León, nombraba a un tal Marcos Sanchez como maestro de dicha escuela. Su otro hijo, don Tristan Díaz de la Torre es, precisamente , el “el contador” y “criado del rey” que recibe del Rey Felipe II el 2 a abril de 1595 el privilegio real de concesión de titulo a perpetuidad de alcalde del castillo de San Vicente de la Barquera, con la condición de que lo “reedificare” a su costa.
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El otro hijo de don Toribio fue don Nicolás de la Torre, natural de Serdio, que caso con doña Toribia de Barreda, de San Vicente de la Barquera, con la que tuvo a don Francisco de la Torre barreda, nacido en 1593, que marcho a las indias y fue capitán y gobernador de la provincia de Tunga en América, y a don Antonio de la Torro Barreda, hombre de leyes que fue ejecutado cuando era Proveedor General del Ejercito de Cataluña por orden del Marques de Aitona .
Es precisamente gracias al informe realizado para el expediente que se instruyo a instancias del capitán don Francisco de la Torre Barreda en su pretensión de ingresar como Caballero de la Orden de Calatrava (ingreso en 1633) por lo que conocemos importantes datos sobre forma y antigüedad de esta casa, ya en la primera mitad del siglo XVII, así como la noticia del incendio sufrido por el lugar de Serdio que la tradición local, la memoria popular, aun recuerda.
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En efecto, los informantes, que se habían ido personalmente a Serdio para poder emitir su informe, describen a vista de ojos la casa solariega y torre primitiva de Serdio de los miembros de este linaje en los siguientes términos: “....vimos que tiene las paredes sin el techo, que dicen y es notorio que se quemo en un incendio no solo general en todo este lugar pero en otros circunvecinos, que se comunico por los campos una legua y más, hará dos años (luego el incendio debió ocurrir en 1631) y vimos que la torre esta mas de la mitad, demuestra grande antigüedad, y al lado de ella otra pared, que dicen todos es parte del solar contiguo, con un pedazo de sitio arruinado con el tiempo que el y la torre esta cuatro o seis pasos distantes, y según la antigüedad de dicha mitad de la torre, seria posible que se denominase el apellido del pretendiente don Francisco de la Torre de ella misma, la cual tiene dos ventanas grandes en el frontispicio, la una mas alta que la otra, muy autorizadas en cada lienzo de los cuatro que tiene labrados desde lo antiguo se ha hecho con arquitectura moderna hay cuatro ventanas todas de arco muy vistosas.
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La casa que estaba edificada al tiempo de agora unida con la misma torre solo tiene paredes de cantería muy fuertes, muestra haber sido suntuoso edificio y muy capaz. Esta es notorio que la edifico un tío del pretendiente que llaman Tristan de la Torre”. Este Tristán de la Torre no es otro que el ya citado alcalde del castillo de San Vicente en 1595.
Un lector anónimo del blog nos aporta esta información, la cual agradecemos: "Francisco de La Torre Barreda fue corregidor de la ciudad de Tunja, en el Nuevo Reino de Granada (hoy Colombia)y por encargo de la Real Audiencia de Santa Fe de Bogotá fue visitador de la ciudad de Santiago de los Caballeros de Mérida(hoy Venezuela) en 1636, en donde juzgó el trato que los encomenderos daban a sus indios, con graves penas. Casó con doña Juana Pacheco-Maldonado Cerrada, hija del gobernador de la Gobernación de Mérida y La Grita, don Juan Pacheco Maldonado.
Una de sus hijas, doña Josefa de La Torre Pacheco casó a su vez con don Ortuño de Tovar Báñez, hijo del capitán don Martín de Tovar y Mendieta, alcaide vitalicio por merced real del castillo de Jaca y sobrino del obispo de Venezuela don fray Mauro de Tovar".
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Otros linajes de Serdio son, los Hoyos, Fernández, Sanchez de Navares, González, Caballero y otros, que fueron propietarios de casonas solariegas muchas de las cuales se conservan. Existen hileras de casas solariegas que son de dos plantas, tejados a dos aguas, y solana entre voladizos, características de los siglos XVII y XVIII, a las que en reformas posteriores, quizás en el siglo XIX, se les ha añadido un pequeño buhardillón.
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En el barrio de los Coteros , existe una hermosa casa con tejado a dos aguas, con bello alero, dos plantas, buhardillón, con solana entre voladizos, y que a jugar por el estilo es del siglo XIX. En el barrio de los Coteros se distinguen a pesar de las reformas, construcciones renacentistas, del siglo XVI y quizás alguna de origen medieval.
En el barrio de los Coteros puede contemplarse una casa muy reformada construida sobre las ruinas de Santa Ana, un antiguo hospital o lazareto de peregrinos. En 1753 se dice por el concejo de Serdio: “Que hay un hospital nombrado de Santa Ana, que ha servido para recoger pobres peregrinos, y por no tener renta alguna se ha llegado a deteriorar” y también que “hay una casa de hospedar pobres peregrinos en el barrio de los Coteros, con suelo firme, tiene de ancho cuatro varas y de fondo siete, arrima con la ermita de dicha Santa Ana y casa de Alonso de Barreda” cuyas propiedades llevaba a renta Juan Francisco Fernández de Zires, vecino de Serdio y eran cobradas por don Juan Antonio de la Torre y Trassierra, cura de Serdio, quien además tenia vienes patrimoniales en dicho lugar y era asimismo administrador del Hospital de la Concepción de San Vicente de la Barquera.
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En Serdio se conserva aun en el barrio de El Cuadrillo los restos de una casa medieval, hoy utilizada como cuadra, a la que se accede a través de una puerta de arco apuntado, ojival. NO lejos de allí, en el barrio de la Riguera o Riguero, existió una ermita bajo la advocación de Nuestra señora de la naval, cuya fiesta se celebraba ya en el siglo XVIII y costeaba el concejo. Esta ermita ha desparecido por completo.
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En Serdio se conserva aun en el barrio de El Cuadrillo los restos de una casa medieval, hoy utilizada como cuadra, a la que se accede a través de una puerta de arco apuntado, ojival. No lejos de allí, en el barrio de la Riguera o Riguero, existió una ermita bajo la advocación de Nuestra señora de la naval, cuya fiesta se celebraba ya en el siglo XVIII y costeaba el concejo. Esta ermita ha desparecido por completo.
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Ya en la primera mitad del siglo XV aparecen miembros de este linaje, así en 1418 vemos a Gonzalo González de la Torre, escribano, como testigo de una escritura otorgada a San Vicente y en esta misma villa encontramos en 1428 a Ruy González de la Torre. Sin embargo, del primero que tenemos noticia que vivia en el siglo XVI en esta casa de Serdio es Toribio de la Torre, quien casado con Maria González de Hoyos (esta ultima hija de Don Juan de Hoyos, señor de la casa y torre de Hoyos, en Narganes).
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En Serdio nacieron sus hijos don Francisco, don Nicolás y don Tristan de la Torre. Don Francisco fundo la Obra Pía de escuela de Serdio, cerca de su casa, y en 1616 su sobrino, el licenciado Fernando de la Torre, canónigo de León, nombraba a un tal Marcos Sanchez como maestro de dicha escuela. Su otro hijo, don Tristan Díaz de la Torre es, precisamente , el “el contador” y “criado del rey” que recibe del Rey Felipe II el 2 a abril de 1595 el privilegio real de concesión de titulo a perpetuidad de alcalde del castillo de San Vicente de la Barquera, con la condición de que lo “reedificare” a su costa.
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El otro hijo de don Toribio fue don Nicolás de la Torre, natural de Serdio, que caso con doña Toribia de Barreda, de San Vicente de la Barquera, con la que tuvo a don Francisco de la Torre barreda, nacido en 1593, que marcho a las indias y fue capitán y gobernador de la provincia de Tunga en América, y a don Antonio de la Torro Barreda, hombre de leyes que fue ejecutado cuando era Proveedor General del Ejercito de Cataluña por orden del Marques de Aitona .
Es precisamente gracias al informe realizado para el expediente que se instruyo a instancias del capitán don Francisco de la Torre Barreda en su pretensión de ingresar como Caballero de la Orden de Calatrava (ingreso en 1633) por lo que conocemos importantes datos sobre forma y antigüedad de esta casa, ya en la primera mitad del siglo XVII, así como la noticia del incendio sufrido por el lugar de Serdio que la tradición local, la memoria popular, aun recuerda.
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En efecto, los informantes, que se habían ido personalmente a Serdio para poder emitir su informe, describen a vista de ojos la casa solariega y torre primitiva de Serdio de los miembros de este linaje en los siguientes términos: “....vimos que tiene las paredes sin el techo, que dicen y es notorio que se quemo en un incendio no solo general en todo este lugar pero en otros circunvecinos, que se comunico por los campos una legua y más, hará dos años (luego el incendio debió ocurrir en 1631) y vimos que la torre esta mas de la mitad, demuestra grande antigüedad, y al lado de ella otra pared, que dicen todos es parte del solar contiguo, con un pedazo de sitio arruinado con el tiempo que el y la torre esta cuatro o seis pasos distantes, y según la antigüedad de dicha mitad de la torre, seria posible que se denominase el apellido del pretendiente don Francisco de la Torre de ella misma, la cual tiene dos ventanas grandes en el frontispicio, la una mas alta que la otra, muy autorizadas en cada lienzo de los cuatro que tiene labrados desde lo antiguo se ha hecho con arquitectura moderna hay cuatro ventanas todas de arco muy vistosas.
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La casa que estaba edificada al tiempo de agora unida con la misma torre solo tiene paredes de cantería muy fuertes, muestra haber sido suntuoso edificio y muy capaz. Esta es notorio que la edifico un tío del pretendiente que llaman Tristan de la Torre”. Este Tristán de la Torre no es otro que el ya citado alcalde del castillo de San Vicente en 1595.
Un lector anónimo del blog nos aporta esta información, la cual agradecemos: "Francisco de La Torre Barreda fue corregidor de la ciudad de Tunja, en el Nuevo Reino de Granada (hoy Colombia)y por encargo de la Real Audiencia de Santa Fe de Bogotá fue visitador de la ciudad de Santiago de los Caballeros de Mérida(hoy Venezuela) en 1636, en donde juzgó el trato que los encomenderos daban a sus indios, con graves penas. Casó con doña Juana Pacheco-Maldonado Cerrada, hija del gobernador de la Gobernación de Mérida y La Grita, don Juan Pacheco Maldonado.
Una de sus hijas, doña Josefa de La Torre Pacheco casó a su vez con don Ortuño de Tovar Báñez, hijo del capitán don Martín de Tovar y Mendieta, alcaide vitalicio por merced real del castillo de Jaca y sobrino del obispo de Venezuela don fray Mauro de Tovar".
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Otros linajes de Serdio son, los Hoyos, Fernández, Sanchez de Navares, González, Caballero y otros, que fueron propietarios de casonas solariegas muchas de las cuales se conservan. Existen hileras de casas solariegas que son de dos plantas, tejados a dos aguas, y solana entre voladizos, características de los siglos XVII y XVIII, a las que en reformas posteriores, quizás en el siglo XIX, se les ha añadido un pequeño buhardillón.
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En el barrio de los Coteros , existe una hermosa casa con tejado a dos aguas, con bello alero, dos plantas, buhardillón, con solana entre voladizos, y que a jugar por el estilo es del siglo XIX. En el barrio de los Coteros se distinguen a pesar de las reformas, construcciones renacentistas, del siglo XVI y quizás alguna de origen medieval.
En el barrio de los Coteros puede contemplarse una casa muy reformada construida sobre las ruinas de Santa Ana, un antiguo hospital o lazareto de peregrinos. En 1753 se dice por el concejo de Serdio: “Que hay un hospital nombrado de Santa Ana, que ha servido para recoger pobres peregrinos, y por no tener renta alguna se ha llegado a deteriorar” y también que “hay una casa de hospedar pobres peregrinos en el barrio de los Coteros, con suelo firme, tiene de ancho cuatro varas y de fondo siete, arrima con la ermita de dicha Santa Ana y casa de Alonso de Barreda” cuyas propiedades llevaba a renta Juan Francisco Fernández de Zires, vecino de Serdio y eran cobradas por don Juan Antonio de la Torre y Trassierra, cura de Serdio, quien además tenia vienes patrimoniales en dicho lugar y era asimismo administrador del Hospital de la Concepción de San Vicente de la Barquera.
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En Serdio se conserva aun en el barrio de El Cuadrillo los restos de una casa medieval, hoy utilizada como cuadra, a la que se accede a través de una puerta de arco apuntado, ojival. NO lejos de allí, en el barrio de la Riguera o Riguero, existió una ermita bajo la advocación de Nuestra señora de la naval, cuya fiesta se celebraba ya en el siglo XVIII y costeaba el concejo. Esta ermita ha desparecido por completo.
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En Serdio se conserva aun en el barrio de El Cuadrillo los restos de una casa medieval, hoy utilizada como cuadra, a la que se accede a través de una puerta de arco apuntado, ojival. No lejos de allí, en el barrio de la Riguera o Riguero, existió una ermita bajo la advocación de Nuestra señora de la naval, cuya fiesta se celebraba ya en el siglo XVIII y costeaba el concejo. Esta ermita ha desparecido por completo.
Francisco de La Torre Barreda fue corregidor de la ciudad de Tunja, en el Nuevo Reino de Granada (hoy Colombia)y por encargo de la Real Audiencia de Santa Fe de Bogotá fue visitador de la ciudad de Santiago de los Caballeros de Mérida(hoy Venezuela) en 1636, en donde juzgó el trato que los encomenderos daban a sus indios, con graves penas.
ResponderEliminarCasó con doña Juana Pacheco-Maldonado Cerrada, hija del gobernador de la Gobernación de Mérida y La Grita, don Juan Pacheco Maldonado.
Una de sus hijas, doña Josefa de La Torre Pacheco casó a su vez con don Ortuño de Tovar Báñez, hijo del capitán don Martín de Tovar y Mendieta, alcaide vitalicio por merced real del castillo de Jaca y sobrino del obispo de Venezuela don fray Mauro de Tovar.
Cualquier dato adicional escribidme a mi correo expomarke@hotmail.com
Saludos
Gracias por el completísimo y, sin duda, interesante comentario informativo. Gracias también por su oferta de responder a posibles consultas que pudiesen surgir en relación al tema.
ResponderEliminarUn saludo
Se me olvidó decir que si alguien deseara realizar una contribución al blog (en forma de artículo) acerca de la historia del pueblo, municipio, o sobre la historia de Cantabria, un tema que sobremanera me interesa y que considero, desafortunadamente, resulta un tanto desconocido para muchos, no duden un contactarnos.
ResponderEliminarSaludo